lunes, 25 de agosto de 2014

FRASES ECONOMÍCAS














PROBLEMAS ECONOMÍCOS BASICOS


Cualquier sociedad, independientemente de su tamaño, de su grado de desarrollo y de su sistema político, trata de solventar, en la medida de lo posible, el problema económico básico que consiste en decidir cómo satisfacer las necesidades ilimitadas de sus miembros por medio de unos recursos que son escasos.

Este problema de carácter general se subdivide en otros tres más concretos que a su vez, son fundamentales e interdependientes: ¿qué producir?, ¿cómo producir? y ¿para quién producir?, es decir, toda sociedad debe decidir cómo asignar sus recursos entre las distintas actividades productivas y cómo se van a distribuir los bienes y servicios de consumo entre los individuos que la componen.
Pues bien, el mecanismo con el que una sociedad se organiza para dar respuesta a estas cuestiones es su sistema económico. Por consiguiente, el sistema económico de una sociedad es el conjunto de relaciones y procedimientos institucionalizados con los que trata de resolver el problema económico básico.

¿Qué producir? La respuesta a la primera de las cuestiones indica en qué se van a emplear los recursos productivos y qué cantidad de producto final se va a obtener con estos medios de producción. Esto dependerá de las necesidades que tengan los miembros de la sociedad y de los recursos de los que se disponga, ya que éstos últimos son limitados y susceptibles de usos alternativos. Este hecho conlleva plantearse otras cuestiones: ¿Se consumirán más bienes de consumo o de producción? ¿Primará la cantidad o la calidad en la producción? ¿Se incrementará la producción de bienes materiales o la prestación de servicios? ¿Se producirán bienes para el mercado interior o se orientará la producción hacia el exterior?                                                         

¿Cómo producir? Esta cuestión se refiere a la organización de la producción, es decir, quién se va a encargar de llevar a cabo la actividad productiva, cómo se va a acometer dicha actividad y cómo van a combinarse los factores productivos de los que se dispone. Todo ello implica que la sociedad se plantee cuestiones como si se utilizarán tecnologías intensivas en maquinaria o mano de obra, si se hará a través de empresas privadas o de iniciativa pública, qué fuentes de energía se utilizarán en la producción o si los procesos productivos por los que se va a optar serán contaminantes o respetuosos con el medio ambiente.

¿Para quién producir? Toda sociedad debe diseñar un sistema de reparto de los bienes y servicios, lo que lleva a reflexionar sobre cuestiones como: ¿Quiénes serán los destinatarios de esa producción, unos pocos o la gran mayoría de los ciudadanos? ¿Qué método o  sistema se va a utilizar para distribuir la totalidad de la producción? ¿La distribución de la renta será igualitaria o se producirán diferencias muy acusadas entre los miembros de la sociedad?

domingo, 24 de agosto de 2014

Definición subjetiva o marjinalista



la definición clásica de la definición subjetiva o marjinalista
es de Lionel Robbins,quien afirma que la economía es la ciencia
que se encarga del estudio de la satisfacción de la necesidad humana
mediante bienes que,siendo escasos tienen usos alternativos entre
los cuales hay que obtar.
Definición Sistemica
desde otro punto de vista la economía puede considerarse un ámbito
bien definido esto significa que la economía es el medio de comunicación
el cual se forman los sistemas económicos.
en esta perspectiva los sistemas económicos son sistemas sociales en las
cuales las comunicaciones que se producen son comunicativas sobre
compensaciones o pagos.
Aquellas que tienen sentido es conomico se producen en los sistemas económicos
aquellos que no tienen sentido se rechazan esta vicion sociológica de la económica
procura comprender la economía como un aspecto integral de la sociedad.

sábado, 23 de agosto de 2014

ECONOMÍA MIXTA

 



Problemática de la economía mixta

Problemas conceptuales

En la práctica es difícil encontrar sistemas económicos puros. 
 Esto se debe, por lo menos en parte, a que, por un lado, incluso los proponentes originales de tales sistemas dejan espacio para el funcionamiento al menos parcial de modelos diferentes -o elementos de tales- dentro de un esquema general que correspondería a su visión  y, segundo, a que en la realidad siempre hay límites prácticos -si no de otra cosa, temporales- a la implementación de tales propuestas. Desde este punto de vista algunos han notado que, a través de la historia, las autoridades (gobiernos o estados) han tendido a ejercer por lo menos algún tipo de control sobre las actividades económicas (impuestos, prohibición de comerciar ciertos productos, etc). Al mismo tiempo, siempre ha habido un límite a la capacidad de esas autoridades para ejercer ese control en forma absoluta. Por lo tanto, la gran mayoría de las economías a través de la historia podrían ser consideradas en la práctica como economías mixtas.
Por lo menos en parte como consecuencia de lo anterior, no hay un consenso acerca de como definir exactamente las economías de los países. Esto tiene como resultado -entre otros- que es difícil diferenciar positivamente una economía mixta de los otros modelos.
Sin embargo, tanto los proponentes de la economía mixta como otros sugieren que, dado que la mayoría de las propuestas económico-políticas implican ciertos elementos centrales sin los cuales -se sugiere- el proyecto no es realizable (tales como un mercado libre o control estatal completo sobre el mercado); siendo, en ese sentido, más acerca de estados ideales que realidades observables y sin embargo generalmente se acepta llamar a una economía que tienda y busque ese situación ideal por el nombre del objetivo final, no seria irracional denominar una economía como mixta cuando el modelo difiera substancialmente de esos proyectos, especialmente si esa diferencia es intencional.
En realidad es difícil esperar que tal mixtura sea perfectamente balanceada. Es legitimo, en consecuencia, notar que algunas economías mixtas tienden a cierta dirección o preservan ciertos elementos que pueden, o no, ser considerados centrales o esenciales para alguna otra visión. Así, por ejemplo, la economía mixta tal como fue implementada en Inglaterra preservo, en gran medida, el sistema de propiedad privada de los medios de producción, consecuentemente, fue denunciada como un disfraz o emeloracion del capitalismo.  En la otra mano, los partidarios del neoliberalismo la denunciaron, notando que introdujo control estatal sobre ciertos sectores económicos, como un primer paso que llevarían irrevocablemente al socialismo y la dictadura
Lo anterior de hecho da origen a problemas que tienen importantes repercusiones en el debate tanto político como económico."El verdadero debate hoy en día gira en torno a encontrar el balance correcto entre el mercado y el gobierno. Ambos son necesarios. Cada uno puede complementar al otro. Este balance será diferente dependiendo de la época y el lugar."

Objetivos principales de la economía mixta

La propuesta de la economía mixta carece, a diferencia de las otras propuestas principales acerca de la organización de los sistemas económicos, de una figura central o "padre fundador". Sin embargo, los proponentes de la economía mixta aceptan generalmente como proyecto central el reemplazo de materias de principios u objetivos ideológicos de largo plazo — tales como poner los procesos y estructuras económicas bajo el dominio absoluto de ya sea la competencia o la cooperación o dar rienda suelta a la libertad económica o la planificación — con la proposición que, en la práctica, ambas perspectivas tienen alguna validez, de acuerdo a lo que se desee lograr. Lo anterior implica que las decisiones al nivel más alto -de economía política- no pueden ser ajenas a, o independientes de, consideraciones y objetivos más amplias, tanto sociales como éticas. Lo económico debe estar, en las palabras de, primero Thorstein Veblen  y, posteriormente, de Karl Polanyi,  integrada ("empotrada" o 'incrustada") con el resto de las estructuras sociales, alternativamente, amenaza con destruirlas. (ver Economía institucional y Democracia económica, etc).
Así, por ejemplo, Tawney argumenta que ".... Cualquier propuesta razonable de organización económica debe tomar en cuenta que, a menos que la industria vaya a estar paralizada por revueltas recurrentes por una humanidad injuriada, debe satisfacer criterios que no son puramente económicos".  En la misma vena Alfred Müller-Armack argumenta que: '"la economía tiene que situarse como una sirviente de la humanidad", al servicio de cosas supra-económicos, tales como valores humanos y culturales  y que "Seria un error calamitoso dar la tarea de crear un orden social final al automatismo del mercado".
Jeffrey Sachs argumenta que tales consideraciones no son, para países afectados por la pobreza, las "más apremiantes. Su mayor desafío, y el más acuciante, es satisfacer las necesidades básicas de sus ciudadanos. Pero, para cada vez más países, la reflexión de Thinley sobre las fuentes máximas de bienestar no solo es oportuna sino urgente. Todos saben de qué manera el consumerismo al estilo estadounidense puede desestabilizar las relaciones sociales y conducir a la agresividad, la soledad, la ambición y el exceso de trabajo al punto del agotamiento.... Cómo guiar a la economía para que produzca felicidad sostenible -combinando bienestar material con salud humana, conservación ambiental y resistencia psicológica y cultural- es una cuestión que es necesario abordar en todas partes.".
Lo anterior implica que, al nivel más general, las políticas económicas de una sociedad no pueden estar constreñidas solamente por consideraciones de crecimiento y eficiencia económica, sino que debe tomar en cuenta criterios de Equidad; Justicia social; Estabilidad o integración (incluyendo tanto consenso político como Cohesión social); a fin de lograr un Desarrollo social y Desarrollo económico entendido como lo que Ignacy Sachs llama desarrollo completo o "total".
Sin embargo, no todos los modelos de la economía mixta están de acuerdo acerca de cual seria el aspecto central a enfatizar. Algunos sugieren, a partir de una propuesta por Abram Bergson  que el aspecto central es la capacidad de elección de los individuos y, a nivel colectivo, la suma de tales elecciones, consecuentemente, la función de la economía es proveer la bases materiales para poder implementar tales decisiones, (ver Economía del bienestar). Para quienes han sido influidos por Ernst Friedrich Schumacher, lo humano es una cuestión de escala, y debe estar en armonía con lo natural (ver Lo pequeño es hermoso, Desarrollo sostenible, etc). Otros, basándose en una propuesta, similar a la original de Tawney pero desarrollada independientemente por los partidarios del ordoliberalismo,  argumentan que la economía debe crear un orden ético que es la base de toda sociedad estable, lo que se implementaría, prácticamente, al nivel distributivo.
Similarmente, hay diferencias respecto al como tales políticas deben ser implementadas. Por ejemplo, para algunos el Estado (entendido como la organización política de la sociedad) debe descargar sus obligaciones al nivel más alto, el de gobierno, cuyas autoridades son elegidas con el propósito, y tienen, por lo tanto la obligación, de dirigir, controlar y administrar las instituciones comunes o cosa pública; mientras que para otros lo funcional es que los problemas sean resueltos por la autoridad al nivel más bajo, más cercana al problema mismo (ver Principio de subsidiariedad). Para aún otros, los problemas deberían ser resueltos en la medida de lo posible no por autoridades políticas sino por la comunidad misma, a través de formas y sistemas de Organizaciones no gubernamentales —incluyendo Movimientos sociales; sindicales; sociedades y asociaciones regionales, locales y generales, etc.
En relación a ese último punto, tanto Schumacher como David Schweickart sugieren que la consideración fundamental no debería ser acerca de la propiedad de los medios de producción, sino el control sobre los mismos: “el problema no está en tener que elegir entre una economía planificada o una de mercado, pero en integrarlas ambas en un sistema democrático”. En otras palabras, si asumimos que la economía debe incorporar objetivos comunales, la forma más funcional de hacerlo es poner las estructuras económicas bajo control comunitario. Eso no impide, en la visión de esos autores, la ganancia personal ni la competencia, o, a nivel más general, el funcionamiento del mercado, pero asegura que ese funcionamiento corresponda a los intereses comunales.
Obviamente, es el crecimiento el que provee los recursos tanto fiscales como más generales que posibilitan el mejoramiento individual esencial para el Bien común y facilita el altruismo social, haciendo así no solo más aceptable políticas distributivas a los sectores que económicamente estén en mejor situación pero creando también las circunstancias en las cuales tanto el estado como los sectores menos favorecidos no necesitan depender de esa buena voluntad para la implementación de tales políticas. Pero igualmente obvio es que si los frutos de ese crecimiento no se distribuyen equitativamente en una sociedad, no se ha alcanzado el propósito:. " si el crecimiento económico no es compartido, el desarrollo ha fallado" (ver también Eficiencia distributiva).
En general, todas esas sugerencias asumen que la persecución del interés común presupone el respeto a la libertad de elegir y disentir pero también de participar, tanto de individuos como de grupos, consecuentemente se encuentran dentro de los límites establecidos por la democracia y el estado de derecho. Así, por ejemplo, Amartya Sen aduce que si bien la democracia no asegura el desarrollo, constituye parte de un “paquete” sin el cual no puede haberlo, En otras palabras, Sen sugiere que la democracia es una condición necesaria pero no suficiente para lograr ese desarrollo verdadero de I. Sachs, pero la democracia en si no puede ser evaluada solo con un criterio instrumental de producir bienestar económico. En las palabras de Joseph E. Stiglitz: "es importante recordar lo central: éxito significa desarrollo sostenible, equitativo y democrático, que se concentra en aumentar los niveles de vida, no solo medidos en términos de PNB.

viernes, 22 de agosto de 2014

ECONOMÍA INFORMAL

 


Se denomina economía informal o economía irregular a la actividad económica oculta sólo por razones de elusión fiscal o de controles administrativos (por ejemplo, el trabajo doméstico no declarado, la venta ambulante espontánea o la infravaloración del precio escriturado en una compraventa inmobiliaria).
La economía informal o irregular forma parte de la economía sumergida, junto con las actividades económicas ilegales (por ejemplo, la facturación falsa o falseada, el tráfico de drogas, el tráfico de armas, la prostitución, el blanqueo de capitales, el crimen organizado y el terrorismo).
La economía sumergida, en la medida en que se transforma en Renta Nacional y acaba integrada en la Demanda agregada, resulta incluida en el dato estadístico del Producto Interior Bruto (PIB), como consecuencia del ajuste de los métodos empleados para estimarlo.
Aunque la economía informal se ha asociado frecuentemente a países en desarrollo y economías emergentes, todos los sistemas económicos, sin excepción, participan de ella.
El daño económico que causa la economía informal al fisco no solamente se cifra en el lucro cesante tributario; se extiende al daño emergente consistente en el disfrute indebido de subvenciones, subsidios, pensiones y demás rúbricas del presupuesto de gastos públicos.
Asimismo, la economía informal constituye uno de los supuestos más dañinos de competencia desleal entre los agentes económicos.
La economía sumergida en España representaría más del 23% del PIB. En España es el equivalente a 240.000 millones de euros  El caso extremo en la Comunidad Europea es Grecia con más del 30% del PIB.
Existen numerosas acepciones en el habla popular para designar esta economía: "pagar bajo cuerda"; "pagar bajo la mesa"; "fuera de los libros" (de contabilidad); "pagar en B" (la tesorería dispondría de una Caja A, que sí formaría parte del Balance, y una Caja B extracontable); "pagar en negro".
El término mercado negro se refiere específicamente a la porción de la economía sumergida basada en el contrabando (cfr. Derechos de Aduanas e Impuestos Especiales).
Numerosos sociólogos, antropólogos o economistas han tratado este tipo de racionalidad económica: Keith Hart o Vittorio Capecchi

jueves, 21 de agosto de 2014

HONDURAS Y SU ECONOMÍA





Honduras es un país que en los últimos años está creciendo de forma importante interiormente, su economía está poco a poco saliendo del pozo y su Producto Interior Bruto cada año crece más. El consumo interno es uno de los factores más importantes del crecimiento económico de este país.

El consumo interno, las exportaciones de frutas y café o marisco, han contribuido a estabilizar un poco una economía convulsa como la hondureña, donde también ha influido de manera destacada la divisa entrada en el país por hondureños que trabajan en el extranjero. 

Los Puertos tanto en el pacífico como el Atlántico benefician las exportaciones. La ganadería y la agricultura también son fuente de ingresos y estabilidad económica en el país, y el turismo en los últimos años está propiciando unos importantes ingresos, sobretodo en las Islas de la Bahía, si bien no es un ingreso determinante como en otros países de su entorno, aunque desde el Gobierno se quiere relanzar este sector para convertirlo en importante fuente de ingresos en el país. 

Los arrecifes de coral de las islas de la Bahía, las Ruinas de copan, la Reserva de la Biosfera de Río Platano… su fauna y su flora son sus principales ganchos turísticos además de, por supuesto, sus playas caribeñas de arena blanca o sus playasvolcánicas de arena oscura del Pacífico. 

Lugares como La Bahía de Tela, o las ya mencionadas Islas de la Bahía, son los lugares más turísticos del país, sin olvidar los deportes acuáticos o La Ceiba y sus fiestas de carnaval.



ECONOMÍA DE LIBRE MERCADO

 



El libre comercio es una política por la cual el gobierno no discrimina a las importaciones o interferir con las exportaciones mediante la aplicación de aranceles o subsidios o cuotas. De acuerdo con la ley de la ventaja comparativa, la política permite que los interlocutores comerciales beneficios mutuos del comercio de bienes y servicios.

Bajo una política de libre comercio, los precios surgen del equilibrio de la oferta y la demanda, y son el único determinante de la asignación de recursos. El comercio "libre" se diferencia de otras formas de la política comercial en la distribución de bienes y servicios entre los países que comercian son determinados por las estrategias de precios que pueden diferir de las que surgiría bajo la desregulación. Estos precios regulados son el resultado de la intervención del gobierno en el mercado a través de los ajustes de precios o restricciones de suministro, incluidas las políticas proteccionistas. Tales intervenciones gubernamentales pueden aumentar y disminuir el costo de los bienes y servicios a los consumidores y productores. Desde la mitad del siglo 20, los países han reducido cada vez más las barreras arancelarias y las restricciones de divisas en el comercio internacional. Otras barreras, sin embargo, que pueden ser igualmente eficaces en obstaculizar el comercio incluyen las cuotas de importación, impuestos, y diversos medios de subvencionar las industrias nacionales. Las intervenciones incluyen subsidios, impuestos y aranceles, barreras no arancelarias, como la legislación reguladora y las cuotas de importación, e incluso inter-gubernamentales logrado acuerdos comerciales como el Tratado de Libre Comercio y el Acuerdo de Libre Comercio de América Central y de cualquier intervención en el mercado gubernamental resulta en precios artificiales.

Características del libre comercio

El libre comercio implica las siguientes características:
  • Comercio de mercancías sin impuestos u otras barreras comerciales
  • Comercio de servicios sin impuestos u otras barreras comerciales
  • La ausencia de políticas "distorsionan el comercio" que dan algunas empresas, hogares, o los factores de producción de una ventaja sobre los demás
  • El libre acceso a los mercados
  • El libre acceso a la información de mercado
  • La incapacidad de las empresas para distorsionar los mercados a través de monopolio impuesto por el gobierno o el poder oligopolio

Economía de libre comercio

Los modelos económicos

 Para más detalles sobre este tema, consulte la oferta y la demanda.

Dos formas sencillas de entender los beneficios propuestos de libre comercio son a través de la teoría de la ventaja comparativa de David Ricardo y analizando el impacto de un arancel o una cuota de importación. Un análisis económico utilizando la ley de la oferta y la demanda y los efectos económicos de un impuesto se puede utilizar para mostrar las ventajas y desventajas teóricas del libre comercio.

 Ventajas de los aranceles

Este gráfico muestra los beneficios de los aranceles a la industria nacional. Supongamos que Japón quiere proteger a una industria nacional que sólo es capaz de producir y vender los widgets en la Ptariff precio. Puesto que hay otros países que exportan los mismos aparatos a un precio de Pworld, la industria de Japón se amenazó con ir a la quiebra deben ser importados a los widgets de su país sin aranceles. Este gráfico también muestra que mientras Ptariff no caiga sobre la intersección de las líneas de suministro y demanda, entonces el equilibrio se puede alcanzar en la que no hay escasez de la demanda o excesos de oferta, por lo que la industria de Japón puede producir y vender los widgets en la misma medida que los fabricantes de cualquier otro país.

En este caso, el precio más alto no causa la producción nacional aumente de QS1 a QS2, puesto que ya se ha asumido en nuestro ejemplo que Japón no puede darse el lujo de entrar en el mercado widget de abajo y la Ptariff precio que la economía mundial tiene para Pworld precio. El efecto de la tarifa sería limitar las importaciones y crear una mayor demanda de aparatos producidos en el país, pero no tienen efecto sobre los precios de consumo, ya que el gráfico muestra que para todas las cantidades a la izquierda de la intersección de las curvas de oferta y demanda, los consumidores van a comprar lo que sea widgets de entrar en el mercado. Como el aumento de las ventas del widget permite a los productores más widgets para entrar en el mercado y la cantidad de importados reproductores domésticos de Japón enfoques QE entonces la tarifa pueden ser eliminados ya que el mercado estará en equilibrio y el precio de mercado de PE será suficiente para que el Japón widgets fabricantes para mantenerse en el negocio.

Actualmente, el Banco Mundial estima que, a lo sumo, las tasas de 20% se puede permitir que las naciones en desarrollo, pero Ha-Joon Chang cree que los niveles más altos pueden estar justificadas por las diferencias de productividad entre países desarrollados y en desarrollo es mucho mayor que la brecha de productividad que países industrializados se enfrentan. Si las principales tarifas de defensa es estimular las industrias nacientes, un arancel debe ser lo suficientemente alta como para permitir los bienes nacionales a competir por el arancel para tener éxito. Esta teoría, conocida como industrialización sustitutiva de importaciones, se considera en gran parte ineficaz para los países actualmente en desarrollo.

 Desventajas de las tarifas

El gráfico de la derecha se analiza el efecto de la imposición de un arancel de importación de algún bien imaginario. Antes de la tarifa, el precio del bien en el mercado mundial es Pworld. El arancel aumenta el precio interno Ptariff. El precio más alto hace que la producción nacional aumente de QS1 a QS2 y hace que el consumo interno disminuirá de QC1 a QC2.

Esto tiene tres efectos principales sobre el bienestar social. Los consumidores están mucho peor que antes, porque el excedente del consumidor se hace más pequeño. Los productores están en mejor situación ya que el excedente del productor se hace más grande. El gobierno también tiene ingresos fiscales adicionales. Sin embargo, la pérdida de los consumidores es mayor que las ganancias de los productores y el gobierno. La magnitud de esta pérdida social se muestra por los dos triángulos de color rosa. Extracción de la tarifa y tener libre comercio sería un beneficio neto para la sociedad.
Un análisis casi idéntico de esta tarifa desde el punto de vista de un país productor neto arroja resultados paralelos. Desde la perspectiva de ese país, el arancel deja productores en peor situación y los consumidores mejor, pero la pérdida neta a los productores es mayor que el beneficio para los consumidores. En un análisis similar, aranceles a la exportación, cuotas de importación y las cuotas de exportación todos dan resultados casi idénticos.

A veces, los consumidores están en mejor situación y los productores en peor situación, ya veces los consumidores están peor y los productores están mejor, pero la imposición de restricciones comerciales provoca una pérdida neta para la sociedad debido a las pérdidas derivadas de las restricciones al comercio son mayores que los beneficios de las restricciones al comercio. El libre comercio crea ganadores y perdedores, pero la teoría y la evidencia empírica muestra que el tamaño de las ganancias del libre comercio son mayores que las pérdidas.

miércoles, 20 de agosto de 2014

EL PADRE DE LA ECONOMÍA


 



Adam Smith (5 de juniojul./ 16 de junio de 1723greg. – 6 de juliojul./ 17 de julio de 1790greg.) fue un economista y filósofo escocés, uno de los mayores exponentes de la economía clásica.

Filósofo y Economista, es el fundador de la teoría economía política y el liberalismo económico. Adam Smith considera el capitalismo como el estadio natural de las relaciones sociales. En su obra principal ” Investigaciones sobre la naturaleza y causa de la riqueza de las naciones,

” el laissez faire” aparece como el motor del progreso económico (libertad absoluta a los industriales y comerciantes sin intervención del Estado)

Para Adam Smith: El dinero tuvo como origen la función de ser un instrumento comercial y como medida de los valores, y la sociedad ha hecho que se produzca la creencia de que el Dinero es portador de felicidad y que se consigue con abundancia de oro y plata y piedras preciosas.

Un país rico es aquél en el que abunda el dinero, y se consigue amasando el oro y la plata. Debido al creciente éxito de estas ideas, las diferentes naciones de Europa se han dedicaron, aunque sin demasiado éxito, a buscar y acumular oro y plata de todas las maneras posibles.

España y Portugal, eran poseedores de las principales minas que proveen a Europa de esos metales, en el Siglo XVI prohibieron su exportación amenazando con graves multas, o la han sometido a enormes tasas. Esta misma prohibición formo parte de la política de la mayoría de las naciones de Europa.

Adam Smith nació en 1723 en Escocia. A los catorce años entró en la Universidad de Glasgow, en 1740, Adam Smith ganó una beca en Oxford, en 1747 empezó a dar clases en la Universidad de Edimburgo. pocos años después fue nombrado catedrático de Lógica de la Universidad de Glasgow, pasando a la Cátedra de Filosofía Moral en 1752.

Adam Smith tomo el cargo de tutor del joven duque de Buccleuch, dimitió de su cátedra en 1764, iniciando un gran viaje alrededor de Europa con el duque.

Obra:

Su célebre obra sistematiza de manera científica las bases del capitalismo moderno, y presentó su justificación teórica en una forma que marcaría el pensamiento de los más influyentes economistas del siglo XIX (a favor y en contra) y que en parte sigue inspirando a los defensores del mercado libre, incluso hoy en día.
Sin embargo, pese a su importancia para la historia de la ciencia económica, es importante recordar que Smith no era únicamente (ni acaso principalmente) un economista; de hecho, en sus tiempos la economía aún no se había desarrollado como disciplina independiente.
La amplitud de sus intereses, que abarcaban no solo economía, ética, filosofía política, y jurisprudencia, sino también literatura (antigua y moderna), lingüística, psicología, y la historia de la ciencia, destaca tanto por su variedad como por su profundidad analítica.
El profesor Julio Harold Cole, de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Francisco Marroquín, dice de Adam Smith:
"En esta época de excesiva especialización, no pueden dejar de impresionarnos la amplitud y profundidad de la erudición de Smith, fiel y genuino representante del espíritu de la Ilustración Escocesa. Sin embargo, por mucho que admiremos sus logros en campos tan variados, no puede negarse tampoco que la posteridad ha decidido recordarle principalmente por sus contribuciones a la ciencia económica, y su fama siempre se basará mayormente en su obra maestra, La Riqueza de las Naciones. Aunque escrita en inglés en el siglo XVIII, ahora pertenece al mundo y a todos los tiempos. Smith separó definitivamente la economía del restrictivo marco de referencia mercantilista, que negaba los beneficios del libre comercio entre las naciones, e hizo de ella el estudio del orden social espontáneo (y generalmente no-intencionado) que surge de los intercambios voluntarios entre individuos que producen beneficios para todas las partes involucradas, sean domésticas o extranjeras. En tanto sobreviva en este mundo el amor por la libertad, los hombres libres seguirán inspirándose en Adam Smith, autor de La Riqueza de las Naciones."

La riqueza de las naciones (The Wealth of Nations)

En 1776 A. Smith publicó su obra Una investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones (o simplemente La riqueza de las naciones), después de más de diez años de trabajo, por la cual es considerado por muchos especialistas el padre de la Economía Política. Esta obra representa el intento por diferenciar la economía política de la ciencia política, la ética y la jurisprudencia. Un elemento fundamental para esta diferenciación fue la crítica al mercantilismo, corriente heterogénea que venía desarrollando nociones económicas desde el siglo XV, más vinculada a los imperios coloniales que a la naciente revolución industrial.
Él mismo consideraba esta serie de volúmenes como una exposición parcial de una obra más amplia sobre «Los principios generales de la ley y del gobierno, y de las diferentes revoluciones que en éstas se han producido en las diferentes épocas y periodos de la sociedad», obra que deseaba escribir pero que nunca llegó a completar. Más aún, incluso en La Riqueza de las Naciones, para Smith la ciencia económica era mucho más que la teoría de precios, producción y distribución, moneda y banca, finanzas públicas, comercio internacional, y crecimiento económico, campos que hoy en día se consideran como especialidades en si mismos. Todos estos temas se discuten en el libro, pero también incluye detalladas discusiones sobre temas tan diversos como historia eclesiástica, demografía, política educacional, ciencias militares, agricultura, y asuntos coloniales.
Según la tesis central de La riqueza de las naciones, la clave del bienestar social está en el crecimiento económico, que se potencia a través de la división del trabajo y la libre competencia. Según esta tesis, la división del trabajo, a su vez, se profundiza a medida que se amplía la extensión de los mercados y por ende la especialización. Por su parte, Adam Smith considera la libre competencia como el medio más idóneo de la economía, afirmando que las contradicciones engendradas por las leyes del mercado serían corregidas por lo que él denominó "la mano invisible" del sistema.
Una particularidad de la obra es el planteamiento de que, gracias a la apelación al egoísmo de los particulares se logra el bienestar general. Al respecto, Adam Smith afirmaba que "el hombre necesita casi constantemente la ayuda de sus semejantes, y es inútil pensar que lo atenderían solamente por benevolencia (...) No es la benevolencia del carnicero o del panadero la que los lleva a procurarnos nuestra comida, sino el cuidado que prestan a sus intereses".
Esto es muchas veces interpretado de forma imprecisa, como que simplemente el egoísmo lleva al bienestar general. Sin embargo, pasajes tanto de esta obra como de los sentimientos morales dejan en claro que en un sistema económico el interés personal no es la única motivación, ya que si así fuera, toda negociación resultaría imposible. El ser humano es capaz también de comprender el interés personal de su compañero y de llegar a un intercambio mutuamente beneficioso. La empatía con el egoísmo del otro (en donde acentúa la siguiente frase: «dame lo que necesito y tendrás lo que deseas») y el reconocimiento de sus necesidades es la mejor forma de satisfacer las necesidades propias. El pensador y economista escocés subraya que la mayor parte de estas necesidades humanas se satisfacen por intercambio y por compra.
La obra incluye una filosofía de la historia, donde la propensión a intercambiar exclusiva del hombre se convierte en el motor del desarrollo humano, porque permite la suficiente creación de riqueza y generación y acumulación de capital para poner en práctica la división del trabajo. Debido por tanto a la empatía y la división del trabajo se potencia el crecimiento económico, clave del bienestar social.
Esta obra constituye también una guía para el diseño de la política económica de un gobierno. Los beneficios de la "mano invisible" del mercado solo se obtendrán en una sociedad bien gobernada.
Entre sus aportes más importantes se destacan:
  • La diferenciación clara entre valor de uso y valor de cambio.
  • El reconocimiento de la división del trabajo, entendida como especialización de tareas, para la reducción de costos de producción.
  • La predicción de posibles conflictos entre los dueños de las fábricas y los trabajadores mal asalariados.
  • La acumulación de capital como fuente para el desarrollo económico.
  • La defensa del mercado competitivo como el mecanismo más eficiente de asignación de recursos.

Preocupaciones sociales

Contrariamente a lo que le achacan algunos críticos debido a los extremos a que el neoliberalismo lleva sus ideas, Adam Smith conocía los peligros que conllevaba su ecuación económica.
Estaba convencido de que un hombre que pasa toda su vida para completar unas pocas operaciones simples cuyos efectos son siempre los mismos, no tiene tiempo para desarrollar su inteligencia ni para practicar su imaginación. El resultado es la pérdida del hábito de ejercer sus facultades y la alienación del individuo. Por ello afirmó que Estado debería «impulsar e incluso imponer» la educación pública de las clases trabajadoras.
De hecho, Adam Smith criticó las vidas miserables que sufrían muchos de sus compatriotas y advirtió que «ninguna sociedad puede ser próspera ni feliz si la mayor parte de sus miembros son pobres y miserables

martes, 19 de agosto de 2014

SUSTITUCION DEL " PATRON- ORO" POR EL " PATRON-TRABAJO "

 



En el capitalismo financiero plutocrático, el capital produce la riqueza, pero en la economía del Tercer Reich, es el trabajo el medio que la produce. Es el trabajo y no el oro, lo que tiene verdadero valor para un país; la mano de obra que transforma las materias primas en productos, los bienes y servicios, la inteligencia de los inventores, ingenieros, técnicos, etc. y en suma cada miembro de la nación que tenga la capacidad de crear algo en beneficio del pueblo.
La economía nacionalsocialista se desliga completamente del sistema monetario basado en el interés, la deuda, el dinero-fiat y el patrón-oro, y esa es una de las razones principales por las que las potencias capitalistas entraron en guerra contra Alemania. En el sistema económico nacionalsocialista sólo se emite moneda para pagar un trabajo realizado. La moneda está respaldada por el trabajo productivo y la riqueza real de la nación, y no, como en el actual sistema económico, por cuestiones intangibles ni por recursos materiales que no existen en la práctica, ni por "la confianza de los mercados", ni por la deuda. La masa monetaria de un país debe ser exactamente igual a la riqueza real y tangible de dicho país y no que haya más dinero o menos dinero que bienes y servicios disponibles. Si el Estado desea crear crédito (dinero), antes debe crear riqueza. En ese sentido, el Tercer Reich no creaba dinero para financiar obras, sino que directamente se ponía a trabajar en las obras, emitiendo dinero a medida que la obra era completada. El dinero se emitía para pagar al trabajador. No se necesitaba dinero para trabajar. El dinero era una consecuencia del trabajo, no del banco ni del mercado.
En los países capitalistas, si no había dinero, todo el trabajo se paralizaba. Por ejemplo, la crisis del 29 se generó porque los capitalistas de Wall Street cerraron el grifo del crédito y luego crearon un gran pánico especulativo. En el capitalismo, si el dinero escasea, da igual que haya obreros cualificados o fábricas en perfecto estado de funcionamiento: la economía no funciona. Esto subordina la economía a la política monetaria y financiera, es decir, a los que controlan el grifo del crédito: bancos centrales y privados, los verdaderos propietarios de la moneda. Sólo cuando los bancos quieren, empieza a fluir el capital y éste reactiva la economía.
En la economía nacionalsocialista era al contrario. Las fábricas siguen funcionando, los obreros siguen trabajando y a fin de mes son retribuidos económicamente con el único fin de facilitarles que puedan intercambiar el sudor de su frente y la riqueza creada por otros bienes y servicios producidos por compatriotas suyos. En el primer caso, son los banqueros y los mercados los que controlan la emisión de moneda. En el segundo caso, son los trabajadores y el Estado los que controlan la emisión de moneda. El dinero se genera dependiendo de cuánto se produce en trabajo.
Los beneficios producidos por las obras públicas costean su propia construcción. Por ende, las obras se pagan a sí mismas, y cada vez que se hace una obra, simplemente se crea dinero para pagar a los trabajadores y así aumenta la masa monetaria conforme al valor real de la obra. De este modo, el asunto de los impuestos sufriría una revolución total en un sistema económico nacionalsocialista: los impuestos podrían bajar muchísimo y hasta suprimirse del todo, lo cual era el objetivo final de los nacionalsocialistas (Véase sección La Hacienda. El Estado sin impuestos).
Siguiendo la base de la abolición del interés del dinero, un banco puede prestar dinero sin interés. El Banco Central de Alemania (el equivalente a la Reserva Federal hoy en día para Estados Unidos) era el Reichsbank el cual, a diferencia de su homólogo americano, creaba dinero libre de deuda y de interés, que representaba un trabajo realizado y que era propiedad del poseedor de dicho trabajo, no del banco. Actualmente, todo el dinero que existe es propiedad del banco, no representa un trabajo sino una deuda o una maniobra especulativa y encima esa deuda es a interés. Eso condena al sistema económico a seguir creando dinero indefinidamente, con el verdadero objetivo de concentrar cada vez más riquezas y medios de producción en menos manos.
El patrón-trabajo es el modo más eficaz de saltarse los mecanismos de aquellos que emplean la emisión de dinero como herramienta de dominación y del trabajo ajeno. El dinero no tiene valor por sí mismo, sólo es un bono por trabajo efectuado, una mera herramienta para facilitar el intercambio de trabajo, bienes y servicios. Nadie puede ponerse a crear dinero al gusto si ese dinero no representa operaciones comerciales susceptibles de ser realizadas o una riqueza real creada.
Este sistema no es novedad: Benjamin Franklin había explicado exactamente lo mismo con respecto a las colonial scriptures, es decir, que simplemente había que crear dinero para regular el flujo de bienes y servicios reales y existentes. Y este dinero, naturalmente, debía estar libre de interés y de deuda, ya que estaba respaldado por bienes y servicios y, por tanto, por el trabajo de quien había creado dichos bienes y servicios. El oro no es necesario, se puede respaldar una moneda con infinidad de activos además del oro.
Alemania no pedía prestado el dinero, lo creaba ella misma a partir de trabajo productivo realizado. Si el Estado crea dinero para pagar a un trabajador que produce algo, el aumento de la masa monetaria no tiene por qué repercutir en un aumento de la inflación ya que también se han aumentado en la misma medida los bienes disponibles por lo producido por este. Mientras el dinero esté respaldado por un activo tangible, no hay inflación.
Los marxistas teorizaban que los factores productivos eran "tierra" (recursos, materias primas, medios de producción), "trabajo" (trabajadores de la cualificación necesaria, obras que necesitan hacerse) y "capital" (dinero). Según esta filosofía, aunque haya tierra y trabajo, si no hay dinero, los trabajadores se quedan en paro y las obras se quedan sin hacerse, o los productos sin distribuir, etc. Esto tiene consecuencias negativas pues condiciona el funcionamiento de la economía a la disponibilidad de dinero, que a su vez depende de los únicos que, hoy en día, están capacitados para crear dinero: los bancos usureros. Si el banco usurero se niega a soltar dinero, o decide mandarlo a otro país, la economía del país se hunde. Y sin embargo, hay trabajadores de sobra y trabajos que necesitan hacerse. Por esa razón se le llama "capitalismo": porque sin capital la economía no funciona. Aceptando esta aberración, los marxistas aceptan de facto las premisas del capitalismo, según la cual la economía sólo florece si es regada con capital, y que el trabajo es una mera consecuencia de ese capital. De este modo, la URSS cambió radicalmente el sistema económico, pero el sistema financiero seguía siendo el mismo: el trabajo seguía dependiendo del dinero. El Tercer Reich hizo lo contrario, el sistema económico no sufrió modificaciones muy radicales, pero el sistema financiero fue subvertido de pies a cabeza: sólo el trabajo creaba riqueza.

lunes, 18 de agosto de 2014

EL ENFOQUE SISTÉMICO


 
El enfoque sistémico no concibe la posibilidad de explicar un elemento si no es precisamente en su relación con el todo. Metodológicamente, por tanto el enfoque sistémico es lo opuesto al individualismo metodológico, aunque esto no implique necesariamente que estén en contradicción.

Una exposición moderna del enfoque sistémico es la llamada Teoría General de Sistemas (TGS) que fue propuesta por el biólogo austriaco Ludwig von Berthalanffy a mediados del siglo veinte. La TGS propone una terminología y unos métodos de análisis que se han generalizado en todos los campos del conocimiento y están siendo usados extensamente por tecnólogos y por científicos de la Física, la Biología y las Ciencias Sociales.

Al describir la economía utilizamos actualmente muchos conceptos tal como los define la TGS. El vocabulario básico de la TGS, recog
teoría económica es el enfoque sistémico que trata de comprender el funcionamiento de la sociedad desde una perspectiva holística e integradora, en donde lo importante son las relaciones entre los componentes. Se llama holismo al punto de vista que se interesa más por el todo que por las partes. ido de diversos campos científicos, incluye entre otros los siguientes conceptos: Sistemas y subsistemas, entradas (inputs) y salidas (outputs), cajas negras y realimentación (feed-back).

Sistema es un conjunto organizado de elementos que interactúan entre sí o son interdependientes, formando un todo complejo, identificable y distinto. Por elementos de un sistema se entienden no solo sus componentes físicos sino las funciones que estos realizan. Algún conjunto de elementos de un sistema puede ser considerado un subsistema si mantienen una relación entre sí que los hace también un conjunto identificable y distinto. Los sistemas reciben del exterior entradas (inputs) en forma, por ejemplo, de información, o de recursos físicos, o de energía. Las entradas son sometidas a procesos de transformación como consecuencia de los cuales se obtienen unos resultados o salidas (outputs). Se dice que hay realimentación o retroalimentación (feed-back): cuando parte de las salidas de un sistema vuelven a él en forma de entrada.  La realimentación es necesaria para que cualquier sistema pueda ejercer control de sus propios procesos. Cuando de un subsistema se conocen solo las entradas y las salidas pero no los procesos internos se dice que es una caja negra.

El enfoque metodológico sistémico en economía es muy anterior a la TGS. Es el enfoque utilizado típicamente en la teoría económica marxista, en el estructuralismo socioeconómico y, en general, por los economistas más partidarios de la intervención del Estado para el control de la economía.

Sin embargo puede argumentarse, y algunos economistas creemos, que el enfoque sistémico y el individualismo metodológico son ambos imprescindibles y complementarios para una comprensión cabal de la economía, la sociedad y las relaciones entre los seres humanos.

domingo, 17 de agosto de 2014

TEORÍA AUSTRIACA DEL CICLO ECONÓMICO

 




La teoría austriaca del ciclo económico (TACE) fue desarrollada por economistas de la escuela de Viena, incluidos F.A. Hayek y L.V. Mises. Explica la relación entre el crédito bancario, el crecimiento económico y los errores de inversión masivos que se acumulan en la fase alcista del ciclo, explotando con la burbuja y destruyendo valor.
Sostiene que una expansión “artificial” del crédito, es decir, no respaldada por ahorro voluntario previo y mediante la manipulación a la baja del tipo de interés, tiende a aumentar la inversión y a crear un falso auge económico, dado que los precios relativos han sido distorsionados por la mayor masa de dinero circulante en la economía. Estas inversiones, que no hubieran sido emprendidas de no ser por la mencionada distorsión, sobreutilizan los bienes de capital acumulados, desviándolos a proyectos no rentables -si hubiera imperado el tipo de interés de mercado- y tarde o temprano producirán sobrevaloraciones en algún o algunos activos. Tales burbujas inevitablemente acaban estallando. Cuando la emisión de nuevos medios fiduciarios cesa, las tasas de interés artificialmente bajas se acomodan en su verdadero nivel de mercado, generalmente muy superior al establecido por los bancos centrales dada la escasez de bienes de capital. Esto corta abruptamente el flujo de crédito barato, y las inversiones que parecían rentables con precios inflados ahora dejan de serlo: la crisis estalla y se efectúa la natural liquidación de las inversiones erróneas.

 hace énfasis en que toda producción requiere tiempo. También transcurre tiempo entre el inicio de la producción y el consumo, por lo que se hace evidente la importancia que estos autores le daban al ahorro en relación con el tiempo en el que se invierte y la duración de dicha inversión. Esta relación será crucial en la forma en que los tipos de interés provocan cambios en la estructura de consumo de bienes de consumo frente a bienes de capital. Este ahorro que procede de los ingresos no gastados de los agentes y que, a través de los bancos, y financia el proceso empresarial. Esta relación puede ser modificada por la autoridad monetaria con el fin de aumentar la actividad económica, produce una disminución del tipo de interés, lo que a priori consigue su objetivo. Sin embargo, esa nueva actividad económica financiada con bajos tipos de interés son realmente actividades que no se llevarían a cabo en situaciones normales; son actividades especulativas y que generan poco o ningún valor añadido. Esta nueva situación solo puede mantenerse en el tiempo si se mantienen los tipos de interés anormalmente bajos, lo que conduciría a una situación cada vez más complicada ya que nuevos recursos irán a parar a estas actividades especulativas. Por otro lado, si cesa la política de tipos de interés bajo, se producirá un pérdida de valor debido a que no es posible retirar todos los recursos asignados a los sectores poco productivos. Otro efecto producido por el aumento de la oferta monetaria es el aumento de la inflación, que cambia la relación entre los bienes de inversión y de consumo y añade problemas al sostenimiento de la política de tipos de interés bajo.


La teoría austriaca del dinero se presenta en la obra “Teoría del dinero y el crédito (1912). A partir de las aportaciones de Menger sobre la utilidad marginal, Mises aplica un modelo de oferta y demanda para explicar el origen del valor del dinero. El elemento central que compone la teoría del valor misiana es que el cambio objetivo (poder adquisitivo) del dinero es el que genera las peculiaridades que tiene, ya que sin capacidad de poder adquisitivo no se haría uso del dinero. Es este elemento el determinante de la demanda y dependerá del valor subjetivo que cada ciudadano tenga del dinero. Por otro lado, el valor subjetivo de cada individuo depende del valor subjetivo del resto de bienes económicos en relación con el dinero. Para los autores austriacos estos dos tipos de valores están relacionados a través del teorema de la regresión monetaria. La demanda de dinero en el día “D” se basa en el poder adquisitivo que poseía en el día “D-1”. Este mismo poder adquisitivo surge por la intersección de la oferta del dinero en el día “D-1” y su demanda que, basándonos en el valor subjetivo de los individuos, situamos nuevamente en el valor determinado por el poder adquisitivo un día antes, en el día “D-2”. Esta regresión puede desarrollarse ad infinitum pero carecería entonces de sentido. Para el autor, esta dinámica empieza en el momento en el que el oro se usaba únicamente como bien, pero su uso como medio de cambio (en palabras misianas su valor de cambio objetivo) aún no existía. En el momento en el que en un pequeño grupo se estandariza el uso de oro como medio de cambio para evitar la ineficiencia de los intercambios del trueque, este posee ya valor de cambio objetivo y nace la dinámica de mercado que produce que este medio se extienda en el resto de regiones. En cuanto a la oferta monetaria de este sistema, para Mises debe estar basada en el patrón oro. Dado que el valor que posee el dinero está basado en una cantidad de oro, este valor no se devalúa. Otra característica que define a la escuela austriaca es que no aceptan la existencia de un término que resuma el sistema general de precios. Para los autores de esta escuela, los precios de todos los bienes, incluido el dinero, se puede expresar en infinidad de relaciones de intercambio respecto al resto de bienes que dependen del valor subjetivo que otorgue cada individuo a dichos bienes. De este modo, cualquier “resumen” de los precios en un solo valor o conjunto de valores únicamente hacer desaparecer los matices generados por un fenómeno complejo en la determinación de precios por un valor más comprensible pero carente de importancia.
Cálculo económico

Con la publicación de “El cálculo económico en la comunidad socialista” (1920), Mises empieza una crítica al sistema socialista que complementa su animadversión por la intervención estatal. La tesis principal presentada en esta obra es que en un sistema donde los precios muestran una limitada relación de intercambio, la información que aporta a los agentes es también limitada. En una economía libre, el cálculo monetario permite apreciar a los agentes las potencialidades económicas. En una economía donde la única fuente de rentabilidad es satisfacer las necesidades del consumidor, los empresarios buscaran cubrir dichas necesidades de la manera más barata posible, garantizando la eficiencia y el progreso. Si el Estado interviene en la economía, incentiva procesos productivos ineficientes y modifica la relación entre precios relativos y la utilidad relativa que obtienen los agentes económicos. En una economía socialista los precios no solo perjudican al mercado de bienes de consumo, donde las preferencias individuales son modificadas como hemos comentado por la intervención estatal, si no que los medios de producción y el mercado de bienes de producción óptimos para producir el bien final deseado no se realiza por el proceso de mercado y por tanto, no se conocerá la eficiencia de dichos métodos. En resumidas cuentas, el desconocimiento de los agentes de los costes que suponen sus acciones lleva a que la producción y el intercambio se realicen en base a criterios no económicos y por tantos ineficientes. Desde el punto de vista de la política monetaria, los órganos gubernamentales tienen a incentivar la economía mediante tipos de interés bajos, lo que provoca inversiones improductivas y conduce a una situación que se desarrolla en la “Teoría austriaca del ciclo económico”.

 Sistema bancario

David Ricardo y otros economistas clásicos de la escuela monetaria fueron los primeros en intentar explicar un fenómeno relativamente nuevo en las últimas etapas de la industrialización inglesa: los ciclos caracterizados por periodos alcistas y crisis periódicas. Hasta entonces los únicos ciclos de escala nacional habían sido los causados por guerras y cosechas. Entre sus observaciones estaba el importante papel que de los efectos monetarios sobre la economía, especialmente desde la centralización por el Banco de Londres (Bank of London) de la emisión de papel moneda tras el "Bank Charter act" de 1844. Los economistas austriacos recogen estas lecciones, junto con antecedentes entre los escolásticos españoles y construyen sobre la base clásica su teoría del crédito que es la base de la teoría austriaca del ciclo económico.
La invención de la banca de reserva fraccional (originalmente una estafa, ya que el contrato de depósito irregular impone obligaciones de custodia) permitió a bancos privados prestar el dinero de sus depositarios a la vez que les garantizaba su disponibilidad, confiando en que sólo una fracción de estos exigirían la devolución de la deuda. De esta forma se confundía el contrato de depósito con el de mutuo y se expande la base monetaria de forma piramidal.
El riesgo asumido por estos bancos a menudo llevaba a quiebras y pánicos bancarios, aunque bastante localizado y centrados en los bancos más especulativos, de hecho los bancos más conservadores normalmente aprovechaban los momentos de desconfianza para hacerse con los activos de bancos menos seguros. En USA durante la era de la Banca Libre (1837-1862) los llamados "Wildcat banks" (por sus remotas sedes) sufrían un tremendo descuento en el valor de su papel comercial fuera de su área directa de influencia, mientras el papel de bancos más conservadores se aceptaba de costa a costa con poco descuento. De esta forma la excesiva creación de liquidez (basada en deuda y sin respaldo real) conllevaba su propio castigo y no afectaba a toda la economía.
Mises enunció la "regla dorada" para la banca, proscribiendo la reserva fraccional en su libro "La Teoría del Dinero y el Crédito" (Mises, 1912). "La única forma de evitar con certeza el riesgo de insolvencia es sencilla: Las obligaciones de pago de los bancos no deben nunca vencer antes que sus derechos de cobro correspondientes."
Sin embargo, con la centralización y cartelización del sistema bancario mediante bancos centrales con el monopolio de emitir moneda de curso legal, las posibilidades de crear dinero basado en deuda (moneda fiduciaria o dinero fiat) se multiplicaron. A medida que los bancos centrales comenzaron a gestionar todas las reservas (principalmente oro) desapareció la disciplina de mercado que imponía la posibilidad de que los depositarios exigieran el reembolso de sus ahorros. Ante la ausencia de mercado libre en la emisión de dinero, el cálculo económico del precio real (en el mercado) del dinero es falseado con facilidad por las entidades públicas de planificación monetaria.
Este proceso de centralización produce la aparición de ciclos económicos nacionales, que afectan a toda la economía, ya que el tipo de interés es el mismo para países enteros. Se agrava además la ilusión monetaria, ya que no se puede comparar la pérdida de valor de la moneda, salvo en el comercio internacional (dónde el patrón oro subsistió casi medio siglo más).

sábado, 16 de agosto de 2014

ECONOMÍA SOCIAL DE MERCADO

 



Origen del término

El primero en usar esta combinación de palabras fue Alfred Müller-Armack, en su libro editado en 1947 “Liderazgo de Economía y Economía de Mercado”. Müller-Armack, presentó el esquema teórico de una “tercera forma”, aparte de la economía de mercado liberal y el liderazgo de economía. Él escogió esa expresión como la idea de un futuro orden económico de la Alemania destruida por la segunda guerra mundial, donde el mercado fuera la columna vertebral de una economía de mercado dirigida por criterios sociales.El intento de combinar el principio de la libertad en el mercado con esta compensación social le llamaba “Fórmula Irena”en alusión a la diosa griega “Eirene”, quien era la hija de Zeus vinculada a la paz. Pero funcionalmente, la ESM concibe a la paz social como un producto logrado a través de la trascendencia de distintas ópticas sectoriales, donde la equidad institucional esté garantizada a priori para los ciudadanos. Para Ludwig Erhard la expresión era una redundancia, ya que para él “el mercado en sí” era social y no necesitaba hacerse social. De todos modos Erhard usó el efecto persuasivo de esta etiqueta de un orden de economía de mercado, en un entorno político controvertido posterior a la Segunda Guerra Mundial.

 La Economía Social de Mercado (ESM), también conocido como capitalismo social o capitalismo renano es un modelo de economía y sociedad "con la meta de crear una economía que desde la base de la competencia combina la libre iniciativa con un progreso social asegurando por la capacidad económica" Originariamente fue un eslogan de elecciones, pero fue iniciada por Ludwig Erhard, quien estaba presente durante los pre-trabajos teóricos, y tuvo mayor impacto en la política económica y social de la República joven. La expresión se basa en Alfred Müller-Armack, quien combinó en este modelo ejemplo elementos del neoliberalismo alemán (en especial el ordoliberalismo, liberalismo sociológico) y la visión social cristiana. Algunos autores lo llamaron “el tercer camino” entre capitalismo y socialismo, otros autores se distanciaron explícitamente del así llamado “tercer camino”. La expresión economía social de mercado se ha convertido en la expresión para la programación económica de la República Federal de Alemania y de Austria, y se ha mostrado que es de multi entendimiento y larga duración. La expresión se hizo la idea directiva de la política gubernamental entre 1949 – 1966 y 1982 – 1998, aún sin un respaldo 100% en la definición del orden económico y político de los elementos claves de Erhard.La economía social de mercado fue nombrada como la programación económica para la política monetaria, económica, y social entre la República Federal de Alemania y la República Democrática Alemana en el contrato bilateral en 1990.